- Durabilidad mejorada: Gracias al plástico ABS de alta resistencia, este rascador resiste el desgaste diario, asegurando un rendimiento constante a lo largo del tiempo.
- Seguridad para la vitrocerámica: Su diseño específico evita rayaduras o daños en la superficie, lo que permite limpiar con eficacia sin comprometer la integridad de la cocina.
- Facilidad de limpieza: Simplifica la eliminación de residuos quemados y manchas, ahorrando tiempo y esfuerzo en la limpieza de la cocina.
- Conservación del aspecto de la vitrocerámica: Ayuda a mantener la superficie brillante y como nueva, extendiendo la vida útil de la vitrocerámica y mejorando la estética de la cocina.
El rascador para vitrocerámica fabricado en plástico ABS de alta resistencia es un accesorio indispensable en la cocina moderna.
Este instrumento está especialmente diseñado para limpiar la superficie de las cocinas de vitrocerámica sin causar daños, gracias a su material de construcción de alta calidad.
El plástico ABS se caracteriza por su durabilidad, resistencia a impactos y altas temperaturas, lo que garantiza una larga vida útil del rascador y seguridad durante su uso.
Con un diseño ergonómico, facilita la eliminación eficaz de residuos quemados y manchas difíciles, manteniendo la vitrocerámica en perfecto estado y preservando su brillo sin esfuerzo.
Rascador para vitrocerámica de alta calidad en plástico ABS de alta resistencia.
Recomendaciones de uso:
Utilizar el rascador en ángulo para aumentar la eficacia en la eliminación de residuos.
Aplicar una ligera presión para evitar daños en la superficie de la vitrocerámica.
Limpiar la superficie previamente para eliminar partículas sueltas y evitar rayaduras.
Usar siempre en superficies frías para prevenir cualquier riesgo de quemaduras o daños por el calor.
Combinar con productos de limpieza específicos para vitrocerámica para obtener mejores resultados.
Recomendaciones de mantenimiento:
Lavar el rascador regularmente con agua y un poco de detergente suave para mantener su higiene.
Secar completamente después de la limpieza para evitar la acumulación de humedad y el deterioro del material.
Revisar y reemplazar las hojas del rascador en caso de desgaste para mantener una eficiencia óptima en la limpieza.